I concurso de olla churra

El pasado día 1 de mayo, la comarca de los Serranos se vistió nuevamente de fiesta. Mientras los alcublanos celebraban su romería a la Cueva Santa, a 12 kilómetros, en Villar del Arzobispo, tenía lugar el I concurso de Olla Churra Villarenca.


El evento organizado por la comisión de fiestas de esta localidad trató de recuperar una fiesta tradicional y reunir a sus vecinos en una comida de hermandad en la zona más antigua de la población. Un concurso que supuso un éxito rotundo en el que participaron alrededor de 140 personas y que no hubiese sido posible sin la colaboración ciudadana y el respaldo de los comercios. Tampoco la lluvia impidió que en las inmediaciones de la plaza De la Fuente y en la Replaceta se repartieran más de 600 raciones de Olla entre los vecinos de Villar.



Embutidos, patatas, alubias, costillas... son sólo algunos de los ingredientes que conforman el manjar más típico de la Serranía. Un plato de fácil elaboración cuyo origen se remonta hace ya más de cien años cuando la gente tenía muy pocos recursos ycombinaba ingredientes baratos y varaidos. Hoy en día este plato se erige como la joya de la comarca y es digno de los paladares más exquisitos.


Pero ?Cómo se elabora la Olla Churra?

Se trata de un plato elaborado a base de carne de cerdo, embutidos, legumbres y verduras típicas de la zona.

INGREDIENTES

-Alubias. Un tazón en remojo desde la noche anterior o en su defecto de bote

-patatas

-acelgas

-cardo

-manitas de cerdo

-1 trozo de jamón

-carne de cordero

-oreja y morro de cerdo

-morcilla de cebolla

-cebolla, pimentón, aceite,sal y azafrán

ELABORACIÓN

En una olla con aua se ponen a cocer las alubias, manitas de cerdo, morro y jamón durante una hora aproximadamente.

A continuación se incorpora el cordero, las acelgas y el cardo. Todo esto se cuece a fuego lento durante 30 minutos.

Por último se incorporan las patatas troceadas a cuadros pequeños, las morcillas y un sofrito de cebolla picada y pimentón (1 cucharadita). Se pone sal y se cuece durante 20 minutos. Si el caldo se reduce mucho, a mitad de cocción se puede ir añadiendo agua

http://www.recetasgratis.es/receta-Olla-Churra-93.html

Alcublas celebra su romería a la Cueva Santa

Puntuales como cada año, a las ocho de la mañana del primer sábado de mayo, prácticamente la totalidad del municipio de Alcublas se agolpa en la plaza de la Iglesia esperando la salida de la Virgen que aparece puntual, arropada por el ruido de la pólvora, los acordes de la música y portada a paso firme y decidido por los quintos.

Ataviados con atuendo militar, los chicos que cumplen 21 años, trasladan la imagen de la Virgen desde Alcublas hasta el Santuario de la Cueva Santa rememorando a los antiguos jóvenres que volvían de hacer el servicio militar obligatorio y portaban la imagen de la Virgen en señal de agradecimiento por su proteción y amparo durante su estancia fuera de casa.
Esta romería forma parte de las tradiciones más arraigadas de Alcublas. Se trata de una costumbre casi milenaria a la que ningún alcublano falta. Ante cualquier adversidad o penuria colectiva siempre se ha invocado a la Virgen para que aliviase la desgracia. La Virgen de la Cueva Santa, aunque no es patrona del municipio, siempre ha sido para el pueblo un símbolo de esperanza y protección.

En la actualidad esta romería no tiene un carácter únicamente religioso sino que los peregrinos la viven de muy diversas maneras. Pero como bien manda la tradición, al amanecer, una romería con más de 800 personas recorre la distancia entre Alcublas y el Santuario de la Cueva Santa. Un peregrinaje de 12 kilómetros en los que se comparte un día festivo y de convivencia vecinal.

Recorridos unos ocho kilómetros, en lo que se conoce como el "descansador" espera el almuerzo. Los coches aparcados en los arcenes, cunetas y orillas de los caminos montan un improvisado merendero en el que un huevo cocido, una empanadilla, un bocadillo y un buen trago de agua proporcionan las energías suficientes para continuar con el camino.

Casi a la llegada del Santuario, los Alcaldes de Alcublas y Antura se intarcambian sus bastones de mando en un acto de hermandad entre ambas localidades, ya que el Santuario está situado en el término municipal de Altura. A lo lejos, se puede apreciar ya como en los alrededores de la Cueva Santa no cabe un alfiler, los coches se han encajado en el paisaje como si de piezas de un puzle se tratase.

Al llegar la imagen de la Virgen es aplaudida por todos los devotos y visitantes. Este año, un grupo de "Tornejants" de Algemesí espera a la Virgen a las puertas de la Cueva para comenzar su danza de orígenes guerreros. El baile, acompañado únicamente por el sonido del tambor, asombra por su fuerza. Es la danza solemne de unos Caballeros ante la imagen de la Virgen que se remonta al Algemesí del siglo XVI.

Tras el espectáculo comienza una misa que se alarga hasta la hora de comer. Mientras tanto, fuera de la Cueva, centenares de personas preparan cestas, neveras, sillas, mesas... para disfrutar con familiarse y amigos de una comida en el campo. Pero este año, la aparición de la lluvia truncó la ilusión de todo un pueblo que se vio obligado a regresar a comer en casa. Pero la tradición y arrago de este día es tal entre los alcublanos que, cuando cesó la lluvia, fueron muchos los que se acercaron de nuevo hasta el Santuario para poder realizar a pie el regreso al pueblo.

Una romería que, a pesar de las adversidades del tiempo, resultó todo un éxito. Ahora sólo queda esperar un año más para que Alcublas en su totalidad vuelva a acudir puntual como siempre a su cita con la Cueva Santa.